UNA REINA QUE SE LEVANTÓ DEL FUEGO
Como escritora, puedo confirmar que hay textos que una escribe con el alma hecha cenizas, y otros, con el alma renaciendo. Sin embargo, “Como el Fénix, pero con corona” es ambos. Es uno de los textos más intensos y reveladores que integran La Reina del Latido de Fuego, un libro donde el corazón se convierte en Reino y el dolor en poesía.
La historia de esta Reina no es solo una fábula, ni una metáfora lejana: nace de una herida real, de esas que duelen tanto que te obligan a transformarte. Escribí este texto como un acto de renacimiento, como quien decide no vengarse sino levantarse.
Les comparto a continuación el relato con el objetivo de que puedan seguir con mayor facilidad el análisis que le sigue.
~❤️~
COMO EL FÉNIX, PERO CON CORONA.
“Respira. Siente tus latidos. Has sido muy lastimada”. La Reina se encuentra arrodillada, hecha bollo, en medio del ya quemado bosque, con lágrimas marcando surcos en sus mejillas y el brillo de sus ojos, apagado. El amor la cegó, y ahora siente su alma hecha pedazos.
Estuvo escondida durante mucho tiempo, analizando sus movimientos, sus mensajes, su Reino. Sólo bastó permitir que el supuesto "Rey" colocara un pie en su eternamente otoñal Reino para que todo se derrumbara. Pues, llegó a destruir, incendiando los frondosos árboles y tornando en gris cada color radiante, para luego borrarse entre las sombras. Las hojas doradas tomaron un color oscuro, como cenizas apagadas con agua. La Reina rápidamente corrió a apagar el corazón del fuego, sin tomar en consideración que ella también resultaría herida.
Al momento que notó el ardor de las llamas en sus vestimentas, se retiró de inmediato. Localizó al impostor a lo lejos, hablaba con los ciudadanos y convenció a algunos en mudarse a su ciudad. Su lengua, tan filosa como colmillo de serpiente, no impidió a la Reina abastecerse con información.
Un par de días después, la Reina había recolectado suficiente contenido como para exponer la verdad del "Rey", que no era Rey, sino un vil destructor de Reinos, que se arrastra sigilosamente como las serpientes, pica, envenena y se marcha. La Reina lo habría sospechado desde un inicio, sin embargo, la gentileza de éste la convenció de lo contrario.
Todavía lamentándose, en medio de su Reino, donde antes era pintado de tonalidades doradas y brillantes, donde antes había caído en el engaño de un falso amor, la Reina se pone de pie al notar pequeños puntos blancos danzando a su alrededor. La Reina levanta la mirada y descubre su Reino tomando un color nuevo, blanco y frío, pero suave. El cual debe atravesar para llegar a su refugio, a su castillo.
El falso "Rey" morirá mordido por sí mismo, pero la Reina vivirá porque se levantó de entre las cenizas y ahora va rumbo a un nuevo comenzar, a un nuevo amor, el suyo propio.
Libro: La Reina del Latido de Fuego.
Autora: Dina Gandul.
~❤️~
En su nivel más superficial de la lectura, este relato nos cuenta la historia de una Reina que ha sido traicionada por un falso Rey. Pero aquí es donde debemos hacer nuestra primera pausa reflexiva:
¿Realmente estamos leyendo sobre una reina literal?
No. Mi manera favorita de expresar mis sentimientos es a través de metáforas, simbolismos y alegorías. Así como el libro, este cuento también está escrito desde el fondo de mis emociones.
Entonces
¿Quién es la reina?
La reina es una persona que se enamoró y fue reducida a “cenizas”. Confió en quien no debía, se dejó conquistar de alguien que en realidad no estaba interesado/a en cuidar de su alma, de sus emociones.
Observemos cómo comienza el texto: "Respira. Siente tus latidos. Has sido muy lastimada". Nos muestra a la reina en un estado de vulnerabilidad y dolor, donde ella misma está tratando de regular el torbellino de emociones que el falso rey le causó al herirla. La descripción física de la Reina "arrodillada, hecha bollo" también nos revela el estado emocional de la Reina: completamente destrozada, derrotada y sin esperanza.
Entendemos cómo se desarrolla la emocionalidad de este personaje. Pero acá van otras preguntas:
¿Es el Reino realmente un lugar físico?¿Por qué la destrucción del bosque le causó tanto dolor?
Cuando se menciona al Reino no hace, en realidad, una referencia física, sino que es un simbolismo así también todo lo que lo compone.
Podemos pensar al Reino como simbología del cuerpo. Dentro de éste se encuentra el bosque, es decir, el alma. Cuando el falso rey quema el bosque, se está haciendo referencia visual de la dimensión del daño emocional que le causó a la reina. El bosque no era sólo un espacio con arbolitos, sino que era ella misma y su zona segura. Incluso era el espacio que ella tenía para interactuar con su pueblo, su gente querida, que también le fue arrebatada.
El Reino comienza siendo "eternamente otoñal" con "tonalidades doradas y brillantes", luego se convierte en gris y cenizas tras el incendio, y finalmente toma un "color nuevo, blanco y frío, pero suave". Esta secuencia no es casual: el otoño dorado representa nostalgia y comodidad; el gris post-incendio simboliza la devastación, obligando a la Reina a salir de su zona de confort; y el blanco final sugiere purificación y nuevo comienzo. Se han pintado los estados de ánimo con colores específicos.
El "falso Rey" no tiene un desarrollo de personaje, pero cumple una función importante en esta narración: es descrito como alguien que "se arrastra sigilosamente como las serpientes, pica, envenena y se marcha". Esta descripción sugiere un patrón de comportamiento depredador, no solo una traición aislada. De esta manera, se puede ver que el personaje se ha construido como un arquetipo del manipulador emocional.
"...se pone de pie al notar pequeños puntos blancos danzando a su alrededor". Esta frase indica un cambio mental y emocional en la Reina, que es, a la vez, el resultado de un proceso: primero el dolor, luego la investigación de la verdad, después la comprensión, y finalmente la decisión de levantarse.
El título "Como el fénix, pero con corona" es una declaración de intenciones literarias. El fénix es el símbolo universal del renacimiento, pero al añadir "con corona", sugiere que este renacimiento incluye la recuperación del poder personal y la dignidad. No es solo sobrevivir; es renacer como soberana de su propia vida.
La verdadera fortaleza del texto radica en que no termina con la Reina encontrando otro Rey, sino descubriendo "un nuevo amor, el suyo propio". Este final rompe con lo que solemos esperar de los cuentos de hadas y deja un mensaje actual y lleno de fuerza.
En conclusión, el texto habla de un alma que se tuvo que reconstruir cuando todo ardía. Es un susurro que nos recuerda que uno/a se puede caer sin dejar de ser Rey o Reina, que podemos encontrarnos a nosotros y a nuestro propio amor incluso (y sobre todo) en nuestro peor momento, cuando creemos que ya no nos queda nada. Ahí, cuando nuestro corazón aún late en fuego a pesar de estar todo en cenizas.
~❤️~
Te aliento a que puedas compartirme en los comentarios qué te pareció el texto y el análisis. Este cuento está incluído en mi libro La Reina del Latido de Fuego. Si ya lo pudiste leer, contame tu experiencia. Y si no lo leíste y te gustaría, házmelo saber.
Columna: Latidos de Fuego ❤️🔥.
Escrito por: Dina Gandul.
En colaboración con Verso Inefable.
Comentarios
Publicar un comentario